miércoles, 17 de agosto de 2011

De temas varios y esas cosas

Este año no he escrito por mi cumpleaños. Es una tontería pero era una tradición que tenía desde los 14 años. Supongo que será por el cambio. Por un cambio producido, que me hace no pegarme tanto a los recuerdos. Ni darle demasiadas vueltas a las cosas que, siendo más jóven y más niño, consideraba más importantes.

Bueno si no lo sabías ya, el día de mi cumpleaños fue increíble. Me quedé tirado en un puerto sin batería en el móvil, nadie paraba ... un espectáculo.

Pero hoy algo me incita a vomitar algo aquí. No sé si es ese resgustillo de vilis que me acaba de venir de repente (¿de verdad que puedes soportar que sea tan esplícito?) o que mi mundo interior está metiendo demasiadas horas extras, pero algo me ha hecho enchufarme "Ama ama y ensancha el alma" y a oscuras, adentrarme a escribir.
Sin tema fijo que tratar premeditado, me lanzo a soltar ideas. La primera es que ser camarero es una puta mierda. Sí. Ahora entiendo porque junto a basurero está considerado como un trabajo de baja categoría. Eso de tener que aguantar a todos los borrachos, al jefe, a la señora con su manzanilla con limón y un hielo. O ese caballero que te pide un café sólo "templado".
Lo cual físicamente es imposible. El café sale caliente. No le puedo soplar. Tengo que servirtelo caliente. En realidad lo que suelo hacer es ponerme a hablar un poco con alguien para esperar que se enfríe, mientras que el que espera su café sólo templado, me mira pensando: "no te acuerdas de mi café."
Fito Paéz que en su día fue camarero, nos dejó estas hermosas palabras: Tras la barra del bar

Cuatro verdades después, tengo que contarte que un amigo se casa la semana que viene. De paso tengo que confesarte que gracias a los 4 sastres y 3 tiendas de ropa más tarde, he decidido volver a retomar eso de la dieta. Madre mía lo que he aguantado:

"Tienes poco cuello" , "estás desproporcionado" , "es que tienes las manos muy grandes" , "es que está usted gordo" "Cuesta 500 euros y está rebajado a la mitad" . Después de esta odisea, tengo claro que la culpa de que me sobren 15 kilos es mía pero mi madre también tiene culpa por haberme creado desproporcionado. Claro, luego yo me miro en el espejo y me quedo perplejo.

Yo por 20 euros de un menú, tengo que tratar de usted, alabar a mis comensales, si puedo hacerles reir y ni mucho menos critiarlos. Y esta gente que vende trajes de 200 euros mínimo tienen derecho a desforgarse. Imaginate que vas a un restaurante de 4 estrellas y pides un solomillo. En esas que viene el metre y te salta: "verá señorita, con lo rellena que está usted, yo le recomendaría un pedazo de pan duro y un poco de agua posada ya que las grasas vacunas ayudarán a desproporcionar aún más (risa suelta) su figura"

Y la verdad, que cambiando de tema brutalmente, sigo un poco rayado con eso de que las vidas ajenas que conozco son perfectas. Me estoy dando cuenta del error que he cometido al amoldar todo un año al horario de un trabajo que ... jajajaja basta con leer la anterior entrada. Por eso cuando explico mis planes, la gente como que no se lo cree. Parece que cuando ellos hablan son tremendos, únicos y todo lo que sueltan por la boca no es una lluvia de mierda idealista y sueños fracasados, si no una verdad única e Ideal que conseguirán.
No sé si a veces peco de demasiado realista o ... pero como decía La Fuga cuando molaba (cuando estaba Rulo) "ya no suelo hacer promesas que luego nunca acabo por cumplir" y así es como me he vuelto. Como soy. En lo que he evolucionado. Los cambios que se hacen gradualmente no son tan impactantes como los que se hacen de manera más visual pero según aprendo, mejor poco y bien que mucho (para que te vean) y mal o peor que haber hecho las cosas con más tranquilidad.

Gracias y ahora a la parte que menos me gusta: Escribir los tags y el título.




3 comentarios:

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  3. Totalmente deacuerdo, joder.

    "Gracias y ahora a la parte que menos me gusta: Escribir los tags y el título."

    Ahí, que no pase desapercibida tu dura labor. Es algo que nunca he hecho y probablemente nunca haré.

    Un saludo!

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