Proposito del año

He tenido toda la noche para reflexionar y pensar. Para no dormir por los nervios y soñar que me gustaría parar diez días. Pero tal y como están las cosas... Mejor no quejarse por si acaso. Mi proposito para este año no es ni adelgazar ni mejorar con el equipo de fútbol ni... Lo importante, lo que realmente tengo que aprender es a canalizar esa rabia, esa energía que me quema por dentro. Porque me he dado cuenta de que en sucesos como los de ayer, no consigo canalizar mi energía, sino que la voy almacenando. Que voy tapando con mantas el fuego que arde en mi interior y después arde.
Como de un puto guerrero ninja, he de canalizar mi energía. Imposible destruirla, necesario transformarla. Soy un niñato al que por razones obvias (todavía no tengo la experiencia suficiente en esto de vivir)le queda mucho que aprender. Y mi propósito para este año es aprender a canalizar de verdad toda esa rabia. Toda esa sobrecarga eléctrica que me satura a veces en los momentos en los que se me busca. No digo que me den chispazos y me líe a tortas así porque sí, si no que en el mundo en el que me muevo, tengo que apretar muchíiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiisimo los dientes. No dejar de sonreir y no perder jamás de los jamases la educación. Si se tercia se llama a los municipales y se zanja el tema.

Ante todo Canalizar, transformar y aguantar. Ahora estoy escuchando un par de canciones que... Seguramente esta primera os la podéis imaginar. Esta segunda, tanto su cantante como la canción son un himno para mí.