miércoles, 24 de febrero de 2010

Casualidades

Este lunes un sms a una amiga pero en vez de marcar su número marqué tan sólo un dígito distinto. Cambié un 9 por un 6.

Y con la tontería mantuve una consersación con un desconocido durante casi tres horas. Vale. Fueron tres mensajes en tres horas supongo que el lunes estaba vago. Por un lado me sorprendió la familiaridad con la que nos tratamos, y por otro las cosas que tiene el destino...tan sólo un dígito.

A lo primero ha ayudado mucho los chats. Lo que antes se hubiera zanjado con un "no se ha equivocado" Esta vez acabó con un "me llamo Jhonatan dew" ¿será esta una nueva forma de hacer amistades? Me refiero a... ¿Cogeremos e iremos cambiando tan sólo un dígito de un número conocido para conocer a más gente? Yo tras mucho reflexionar he decicido bautizar esta modalidad de "chat" o de "conocer a desconocidos" como "anonim" que suene a inglés y moderno pero que conserve ese cierto "espanglish".
Quizás os encontreis leyendo al creador de una nueva moda de conocer a gente. "El espanglish" creado por Unai, cuyo nombre no suena muy inglés pero cuyo significado si puede sonar americano" La verdad es que ya que tanto nos gustan los juego de azar y el morbo de lo desconocido... Quizás triunfe (cosas más raras se habrán visto)

Y en cuanto a lo del destino... Tan sólo un número. Un número nos separa de un futuro distinto al esperado. Es decir. A envia un sms a B. " Emily no llegaré a cenar" pero en vez de a B enviá sin querer o por el error de un dígito a C. Y C lógicamente responde quizás de manera poco normal. "creo que te has equivocado. Por cierto me llamo Isabela" Y en en un hipotético caso... ¿y si A y C comienzan una vinculación por tan sólo el error de un dígito?



Sin duda son cosas que no están en nuestras manos... ¿o sí? Tan sólo recordar una palabra "anonim"

No hay comentarios:

Publicar un comentario